Aunque no lo parezca, los aparatos electrónicos son elementos especialmente propicios a acumular suciedad y gérmenes, su limpieza puede resultar sencilla si aprendemos hacerlo bien.
Debemos empezar apagando el aparato para evitar accidentes, nunca pulverizar productos sobre ellos ni hacer presión, tampoco usar productos abrasivos, los trapos escogeremos los que no suelten pelusas y tendremos a mano un cepillo pequeño, para limpiar ranuras y espacios de difícil acceso.
Las pantallas tanto de televisores, ordenadores, videoteléfonos o móviles, podemos limpiarlas con paños de microfibra para no arañarlos, también podemos humedecerlos con un poco de detergente suave.
Las conexiones y el cableado almacenan mucho polvo y será necesario realizar una limpieza frecuente de los mismos. Para las clavijas y enchufes que estén especialmente sucios aplicaremos sprays especiales y después limpiaremos a fondo con un trapo.
Al teclado tendremos que darle la vuelta y sacudirlo suavemente, limpiar la superficie y las teclas con un algodón humedecido en limpiacristales, limpiaremos así también los huequecitos o aplicando aire comprimido.
Uno de los elementos que más suciedad y bacterias acumula es el mando a distancia. Para su limpieza podemos usar un limpiador no agresivo y un paño suave. Es conveniente de vez en cuando realizarles una limpieza interna.
Tanto el teléfono fijo como la carcasa del teléfono móvil, podemos limpiarlo con un algodón ligeramente humedecido en alcohol de quemar para eliminar las manchas, para el resto se usa alcohol de 96 grados haciendo especial hincapié en los auriculares.
Como ves mantener correctamente limpios los aparatos electrónicos ya sea en nuestro trabajo como en el hogar, contribuirá a crear una buena higiene y aumentar la vida útil de estos aparatos.
Gracias por compartir la información en redes sociales.
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